Mª Jesús, nació en Perú en el seno de una familia como ella misma define de “clase media” lo que le permitió realizar estudios, se graduó como Técnica de Enfermería trabajando mas tarde de sanitaria en el Hospital Belén de Trujillo, esta casada y es madre de cuatro hijos. Ante la situación de la inseguridad que vivía su país y el deseo de mejorar para poder ayudar a los suyos a forjar un futuro, Mª Jesús decide hacer las maletas y venirse a Barcelona aferrándose a ella como “tabla de salvación”.

Su sueño era trabajar y ahorrar lo suficiente para regresar a Perú y poner un negocio, concretamente soñó con una tienda de ropa, no fue fácil, fue duro pero después de tres años de apretarse el cinturón consiguió hacerse con el dinero que le permitiría realizar su sueño, la nostalgia y la falta de los suyos la hicieron regresar.

Llega a Perú pone manos a la obra y consigue materializar su sueño, se embarca en el negocio de la ropa. No tuvo suerte y fracasó, fue entonces cuando a su marido se le presenta la oportunidad de engrosar la lista de emigrantes y es a el en esta ocasión al que le toca hacer las maletas. Ella debe quedarse a cuidar de los niños y permanecen separados cinco años hasta que como ella dice su situación era insostenible, pensó que su matrimonio se estaba agrietando sus hijos necesitaban a su padre y el a ellos, no podía seguir viviendo así había que hacer algo, Mª Jesús coge a sus cuatros hijos y se embarca en la que sería su segunda emigración.

Una vez en Barcelona consiguen normalizar su situación y a trancas y barrancas la vida va transcurriendo y aparece la crisis, haciendo mella en sus vidas. Sus hijos mayores se ponen a trabajar no consiguen ejercer su profesión uno Ingeniero Informático el otro Veterinario; de sus hijas la mayor trabaja de cuidadora de una persona que padece (diversidad funcional), la pequeña con dieciocho años decide dejar sus estudios en primero de bachiller y regresar a Perú a vivir con su abuela ve mas futuro allí que aquí, aunque llegó siendo muy chiquitita está convencida de que la crisis ha traído además de falta de trabajo y hambre, discriminación y que está en clara desventaja. De igual forma que la regla matemática del dos mas dos son cuatro, piensa que capacidad más misma preparación es igual a clara desventaja para la mujer inmigrante.

Escuchando a su hija, Mª Jesús se viene abajo hace un resumen de su historia y piensa que esta crisis, esta maldita crisis le ha afectado y mucho. Igual que su hija cree que la discrimina la pone a la cola a la hora de encontrar trabajo, aunque su preparación sea la misma que la de un autóctono, siente que le ha robado la oportunidad de trabajar de lo que realmente sabe, entiende y está preparada degradando de esta forma su categoría profesional, le afecta a la hora de conseguir sus permisos oficiales…

Le afecta hasta el punto de hacerle sentirse infeliz obligándole a cuestionarse si acertó o se equivocó en el momento de tomar la decisión de “emigrar por una vida mejor”.

Magui Turnes