Llegó al mundo gritando
su madre murió a su lado
es pequeño pero sabio,
sabe que el mundo lo ha olvidado
camina sin rumbo alguno,
sin destino trazado
pisan sus pies descalzos,
suelo de tierra quebrado.
Suelo seco, adusto
de agua de lluvia ávido
estéril para dar fruto,
alimento necesario
cubren su cuerpo
andrajos de difunto,
harapos de sentimientos rotos,
maltratados, muertos.
Son las moscas sus juguetes,
esas moscas familiares
de las que escribió Machado,
esas moscas vulgares.
La miseria su compañera
el hambre su tutora
desde que cae la noche
hasta la clara aurora
suena su barriga
a redoble de tambor,
tocan sus costillas de teclas de piano,
música de réquiem,
una muerte va anunciando
un día no pisará esa tierra
ni vestido ni calzado
ni desnudo ni descalzo
por la parca será abrazado
un buitre velará su cuerpo,
chiquitito y cansado
será su alimento,
cuando sus ojos se hayan cerrado
Magui Turnes
Magui, emocionante poema que dibuja a la perfección la realidad de la infancia del tercer mundo, precisamente en una fecha (20N) en que se celebra el día mundial de los derechos del niño.
Una vez más tengo que felicitarte por la fuerza descriptiva y la musicalidad que sabes imprimir a tus versos.
Gracias guapetona